Encontraron a Tigra como un pequeño gatito entre las tablas de una casa quemada. Sobrevivió por milagro: quemada, asustada y diminuta. Los voluntarios del refugio "Ohana" la acogieron, la cuidaron y le dieron una oportunidad para una nueva vida. Así comenzó su historia.

Salvaje de corazón

Ha pasado un buen tiempo desde entonces. Tigra ha crecido en el refugio, bajo el cuidado de un gato naranja llamado Alf, que se ha convertido en una especie de papá adoptivo para ella. Le enseñó a confiar, a compartir comida y a aceptar caricias. Pero parte de su pasado salvaje quedó grabada en su corazón para siempre. Su nombre, Tigra, no es casualidad. Esta gata tiene carácter. Puede ser cariñosa, si está de humor, pero en general prefiere mantener distancia. No se andará con rodeos con extraños: si algo no le gusta, lo dejará claro con una patita y mostrará quién manda en casa. No es una gata malvada, simplemente es independiente. Y muy inteligente. Además, los ratones no tienen oportunidad con ella, ya que Tigra es una cazadora excepcional. Es perfecta para una granja, un terreno o una casa particular.

¿Cómo ayudar a Tigra?

Regálale un Día de Gato o una Semana de Gato; esto ayudará al refugio a cuidar de ella: alimentarla y mantener condiciones cómodas. Y si conoces a alguien con un terreno que respete a los animales, cuéntale sobre Tigra. Ella no necesita un dueño, sino un aliado.