Y los gatos de raza no están a salvo de la vida en la calle. Especialmente aquellos con deformidades congénitas. Así fue como Tango terminó en la calle... Pero los voluntarios no lo dejaron en la desgracia y lo llevaron a un hogar temporal, donde una chica de buen corazón se ocupó de él, hasta que hubo un lugar disponible en "Esperanza". Ahora este lindo gatito espera su oportunidad de felicidad en el refugio.

La fuerza del espíritu

A pesar del problema genético que causa las deformidades en sus patas, el espíritu de Tango sigue intacto. Este gatito irradia calidez y ternura, llenando los corazones de los voluntarios de alegría. Busca un hogar que lo acepte tal como es y que lo ame sin condiciones.

Cuida de Tango

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