Además de su trabajo principal en el refugio, los empleados se dirigen a varios lugares donde viven perros callejeros para ayudarles. En un invierno harsh, uno de estos "subalternos", salvaje y escurridizo, dio a luz en plena calle. Solo un pequeño sobrevivió; fue llevado para darle la oportunidad de vivir en calor y seguridad, lo que sus padres jamás pudieron tener.

Líder de buen corazón

Richi es un líder nato. Es seguro de sí mismo, le gusta que todo vaya según sus planes, y explora el mundo a su alrededor con curiosidad. Además, es muy sociable: se lleva bien con las personas y otros animales, sin mostrar agresión o miedo. Ya se ha acostumbrado a pasear con correa y está listo para seguir aprendiendo y convertirse en un compañero educado y leal.

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