Osy antes vivía con una abuela en Rybinsk junto a otros gatos. Pero un día, la dueña perdió su hogar y tuvo que buscar un nuevo lugar para sus amigos peludos. Así fue como Osy llegó al refugio de animales, donde cada día espera con esperanza a que alguien venga por él.
Un verdadero amigo para noches reconfortantes
Osy adora observar todo lo que sucede a su alrededor. En cuanto entras a la habitación, te nota de inmediato y te saluda con un amable “miau”, como si dijera: “¡Eh, acaríciame!” Este gatito es discreto y cariñoso, y su pasatiempo favorito es encontrar el zen en el alféizar de la ventana o acurrucarse a tu lado en el sofá.
Regala a Osy un poco de felicidad
Si no puedes llevar a Osy a casa, regálale KotoDías en el sitio web de TEDDY FOOD. Y si decides que este filósofo peludo es exactamente lo que te hacía falta, ven a conocerlo. ¡Osy te estará esperando!