Antes, Nyusha vivía en la calle: cautelosa, independiente, con desconfianza hacia las personas. Incluso cuando fue atropellada, no se permitió aceptar ayuda. La fractura de su pata sanó por sí misma; ahora, se sostiene firme sobre sus cuatro patas. Un día, lograron atraparla y llevarla al refugio, donde comenzó su nueva vida.
Después de un año, Nyusha se trasladó a su primer hogar. Se esforzó mucho, pero resultó que le cuesta lidiar con la soledad cuando su persona se va a trabajar. Un día, hizo un túnel debajo de la cerca y escapó. Desde entonces, no vinieron a buscarla.

De nuevo en búsqueda de hogar

Ahora, Nyusha es una dulce y cariñosa chica que busca acercarse a las personas. Le encanta recibir atención, abrazos y paseos acogedores. Sería ideal para una familia con niños o para adultos que tengan tiempo y calor para esta sensible amiga.

Cómo ayudar

Si no puedes llevar a Nyusha a casa, ¡cuéntale a tus amigos sobre ella y ofrécele deliciosos Día de Perro! Cualquier ayuda la acerca un paso más a encontrar a esa persona especial.