Nois apareció en el pueblo como un fantasma: delgado, desgastado y completamente ciego. Sus orejas cortadas delatan su pasado como animal doméstico, pero cómo terminó en la calle sigue siendo un misterio. Ahora, este caballero tiene la oportunidad de una nueva vida.

Vidente de corazón

Este perro es un verdadero milagro, y a pesar de su historia, ha mantenido su cariño y confianza hacia las personas. Nois adora las caricias y espera con ansias los paseos con correa. La ceguera de Nois requiere un enfoque especial: necesita rutas familiares y más contacto táctil. Este leal amigo estará agradecido por cada minuto de atención.

Cómo ayudar

Comparte esta historia para que Nois encuentre pronto a su "familia". O regálale un paquete publicitario, para aumentar sus posibilidades de encontrar un hogar.