Nimfadora era la favorita de su dueño, pero tras su fallecimiento, los herederos echaron a la gata a la calle y pusieron la casa a la venta. Nimfadora quedó completamente sola, hasta que la notó la voluntaria más veterana del refugio, la abuela Tanya, de ochenta años, quien llevó a Nimfadora al refugio.
Orientada a las personas
Nimfadora es una gata cariñosa y enfocada en los humanos. Para ella, estar cerca de las personas es una verdadera felicidad. Se comunica fácilmente con todos los miembros de la familia, es delicada en sus interacciones y se lleva muy bien con otros gatos.
Cómo ayudar a Nimfadora
Puedes contarle a tus amigos y compartir su historia en redes sociales, ¿quién sabe? Tal vez la persona adecuada para esta belleza esté a solo un apretón de manos de ti.






