Los perros callejeros suelen habitar en zonas industriales y almacenes. A veces reciben comida, a veces son echados. Depende de la suerte. En tales condiciones, tienen que sobrevivir y esperar solo en sí mismos. La historia de Nika comenzó precisamente en un lugar así. Ella nació en la calle y vivió con su mamá y sus hermanitas, escondiéndose de las personas. A veces se les veía bajo una losa de concreto al borde de la carretera o en un cobertizo abandonado…
Algunas personas solidarias decidieron ayudar a la familia y llevarla a un refugio de animales. Se logró atrapar a los cachorros, y entre ellos estaba Nika. Sin embargo, no pudieron capturar a su mamá, por más que lo intentaron. Ella es tan inteligente y cautelosa: la vida le enseñó a no acercarse mucho a los humanos.
Una perrita astuta y educada
En el refugio, los cachorros se acostumbraron rápidamente a las personas, ya que no tuvieron tiempo de volverse salvajes durante su vida en la calle. A Nika le encanta recibir caricias y el contacto humano. Ahora vive con su hermano Trisha y otra Nika.
Para que las personas conozcan a los animales de los refugios, regularmente lanzamos publicidad en internet. Al pagar un paquete publicitario para Nika, aumentarás sus posibilidades de encontrar un hogar. También puedes compartir su historia en las redes sociales. ¿Y si alguno de tus amigos se interesa en esta maravillosa perrita? Mientras tanto, Nika siempre estará feliz con un plato de comida deliciosa mientras espera a su dueño.