La historia de Meyson comenzó en la oscuridad de un sótano cerrado, donde lo encontró una amable cuidadora. A pesar de su notable desnutrición (lo cual es especialmente evidente en un gato tan grande), en él se adivina de inmediato a un antiguo animal doméstico.
Gato aristócrata: le encantan las charlas tranquilas
Meyson es la encarnación de la elegancia felina. No es de los que demandan atención de manera insistente, más bien al contrario, pero valora las conversaciones tranquilas y se convertirá en un excelente compañero para noches acogedoras y sin prisa. Sus modales son impecables: utiliza su arenero y rascador a la perfección. Se lleva bien con otros gatos grandes, pero lo ideal para él sería un hogar donde pueda ser el único animal. La ausencia de niños pequeños (el ruido y los juegos activos lo asustan) es bienvenida.
Cómo ayudar ahora
Si estás listo para ofrecerle a este aristócrata un rincón tranquilo y una vida apacible, ven a conocerlo. O también puedes visitarlo en línea y consentirlo con algunas raciones de deliciosos Día de Gato, él también lo apreciará.






