Maus fue traído al refugio de animales cuando aún era un gatito. Estaba enfermo y los voluntarios no sabían si el pequeño podría sobreponerse. Largos días de tratamiento y cuidados hicieron su trabajo: Maus se recuperó, pero no logró confiar completamente en las personas. Su socialización ha sido difícil y, a diferencia de otros gatitos, no encontró un hogar de inmediato.

El alma delicada de un gato

Maus es un gato especial. Trata a las personas con cautela y no está listo para sentarse en brazos, pero en el fondo anhela el cuidado y la comprensión. Necesita un dueño que lo acepte tal como es: independiente, un poco miedoso, pero increíblemente tierno. En un entorno cómodo, sin movimientos bruscos ni atención excesiva, Maus se abrirá poco a poco y podrá sentir que está en casa.

Ayuda a Maus

Este hermoso gatito aún está esperando a su familia. Mientras sigue viviendo en el refugio, tú puedes ayudarlo, financiando un Día de Gato o participando en la recaudación para su tratamiento, si hay alguna en su página. La atención y el cariño hacen maravillas; ¡démosle a Maus una oportunidad para una vida mejor!