Por ironía del destino, la vida de Marmelad no ha sido nada dulce desde su nacimiento. Desde pequeño, lo separaron de su madre gata y luego lo abandonaron junto a otros 15 desafortunados en las estepas fuera de la ciudad. Ahí, los pequeños habrían perecido por el mal tiempo, los perros callejeros y los cuervos omnipresentes, si no hubiera sido por algunas personas compasivas que intentaron salvarlos. Pero el refugio no pudo ayudar mucho y, al perder varios gatitos, 11 valientes fueron enviados a un centro de rescate a más de cien kilómetros de su hogar. Ahora Marmelad ha crecido y casi ha olvidado sus penas. Sin embargo, sueña con encontrarse con su persona y encontrar un hogar lleno de amor y felicidad absoluta.
Un dulce gatito en busca de un hogar
Marmelad, el encantador gato de pelaje naranja y con un collar blanco, es realmente carismático. Es elegante, hermoso, abierto a las personas, pero al mismo tiempo un poco tímido. Con los desconocidos, es cauteloso y necesita un tiempo para acostumbrarse. Sí, los cambios de ambiente, los movimientos bruscos y los ruidos fuertes le asustan un poco, pero su curiosidad supera su miedo. ¿Algo se movió? Puede ser aterrador, ¡pero necesita ir a ver! ¿Vio a otros gatos? Puede asustarse, pero tiene que olfatear. A Marmelad le encantan los juegos activos y los juguetes adorables, siempre encuentra algo que hacer en la ausencia de sus dueños. Es imposible enojarse con él por mucho tiempo; sus expresiones divertidas desvanecen cualquier tristeza. ¡Es imposible no enamorarse de Marmelad! Está hecho para dar calidez y comodidad y seguramente se convertirá en el favorito de una nueva familia. No le importa mudarse a un nuevo hogar y estará feliz si hay niños y otros animales en él.
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