Heidi es una gatita aún muy joven, casi una niña. La encontraron en la carretera, asustada y desnutrida. Voluntarios compasivos llevaron a la pequeña al refugio de animales, pero su estrés es tan grande que no se permitió acercarse de inmediato. Ahora, Heidi está en el refugio, a salvo y rodeada de cuidados, pero le han diagnosticado PIF (peritonitis infecciosa felina) y necesita tratamiento. Heidi cree que un milagro sucederá, que superará esta prueba y encontrará un hogar y una familia.
Una chica con un corazón cristalino
Heidi se muestra temerosa y cautelosa hacia las nuevas personas. Al parecer, la vida en la calle no fue fácil para ella. Es poco probable que se atreva a acercarse primero, pero una vez que conozca mejor a alguien, seguramente le dará una oportunidad. Su corazón anhela el amor, y el personal del refugio cree que, una vez que Heidi encuentre a su persona, su corazón se abrirá. ¡El amor puede hacer maravillas! Heidi está acostumbrada a la caja de arena y al rascador, así que no causa problemas en ese sentido. Esperamos que esta encantadora niña sea amada y feliz en una familia, y quizás ahora lo esté leyendo esa persona que está lista para brindarle esta oportunidad. La presencia de niños u otros animales no es un obstáculo, pero se puede discutir individualmente.
¿Cómo ayudar a Heidi?
Heidi necesita ayuda y apoyo. Cada persona que no pase de largo contribuirá inmensamente a su futuro. Ayuda al refugio con los costos médicos necesarios para Heidi y apóyala en su difusión. Así, Heidi tendrá más oportunidades de recuperarse pronto y encontrar un hogar y una familia. Y, por supuesto, no te olvides de los Días de Gato, las Semanas de Gato y los Meses de Gato para que la pequeña no necesite nada mientras se recupera y vive en el refugio.