La llevaron al refugio de animales de la calle poco antes de dar a luz. Primero, Dusa alimentó a sus pequeños, y luego se sometió a una operación en la que le removieron una piedra de la vejiga. Ahora Dusa está bien, pero necesita un control médico cada tres meses.

Una acogedora y dulce compañerita

Dusa disfruta del cariño, pero es cautelosa con las personas nuevas y evita que la miren demasiado. Cuando alguien extiende una mano hacia ella, agacha las orejas y pregunta con la mirada: “¿No me harás daño?” En brazos, ronronea como un cómodo motor y emite sonidos divertidos. No le agrada estar con otros gatos, prefiere la soledad, aunque le encanta jugar, especialmente con una pelotita. Esta dulce criatura necesita una vida tranquila y una persona cariñosa a su lado.

Regálale felicidad a Dusa

Comparte su historia en redes sociales o apoya con un Paquete Publicitario. Cuantas más personas conozcan a la maravillosa Dulsiná, más pronto encontrará un hogar. Mímala con Días de Gato, Semanas de Gato o Mes de Gato, ya que esta linda soul necesita comida terapéutica. Echa un vistazo en línea para ver cómo está la gatita o ven a conocerla.