Didi y su hermano fueron abandonados en una gasolinera junto a la carretera cuando aún eran adolescentes. Pasaron cerca de dos meses viviendo entre el ruido de los coches y algunas donaciones esporádicas, hasta que fueron rescatados y llevados al refugio de animales. El hermano de Didi ya ha encontrado su hogar hace seis meses, mientras que ella sigue esperando su oportunidad. A pesar de su difícil comienzo, Didi ha mantenido su amor por la vida y una apertura hacia las personas.
Una juguetona cariñosa
Didi es una gatita activa, cariñosa y muy táctil. Le encanta recibir atención, disfruta jugando y siempre busca estar cerca de las personas. Sin embargo, no se lleva bien con los perros y se sentirá más cómoda en un hogar sin ellos. Didi es portadora del virus de leucemia felina, por lo que necesita vivir como única animal o con gatos que tengan el mismo estatus.
Cómo ayudar a Didi
Mientras ella espera a su persona, puedes visitarla en línea y consentirla con deliciosos Día de Gato, así le estarás regalando tu atención.






