El chico tenía dueños, pero cuando el cachorro creció, se volvió innecesario. Al parecer, se hizo inesperadamente grande. De repente, el perrito empezó a perderse regularmente. Varias veces lo devolvieron, pero al final Boss terminó en la calle. Un día, simplemente no lo dejaron entrar a casa. Desde finales de otoño, recorría diligentemente de un extremo de la ciudad al otro, triste, bondadoso y tan solo. En enero, lo encontraron cerca de una tienda. Boss se rindió. Estaba cubierto de nieve, y el dulce perrito yacía inmóvil, ni siquiera intentaba calentarse. En la ciudad organizaron una recaudación de fondos urgente y lograron colocar a Boss en un lugar temporal. Lo sacaron de la calle, lo calentaron y lo alimentaron, y ahora necesita un nuevo hogar.

El Jefe de los Corazones Humanos

Bondadoso, cariñoso e increíblemente dulce, Boss se convertirá en un amigo leal para las personas buenas. La vida en la calle lo ha marcado: teme las motocicletas, las bicicletas, a los hombres que sostienen algo en las manos, a los adolescentes ruidosos y a los borrachos. Mira con desconfianza las escaleras y los peldaños. Se lleva bien con los perros y es indiferente a los gatos. Sueña con una vida en una casa particular y con calor, rodeado de personas que lo amen y cuiden.

Regala felicidad a Boss

Cuenta la historia de este lindo chico en las redes sociales o paga un Paquete Publicitario. Cuantos más sepan de él, más rápido Boss encontrará un hogar. Dale de comer al dulce barbudo en los Días de Perro, Semanas de Perro y Mes de Perro, para que coma bien. Observa online al guapo y envíale saludos. Ven a conocerlo si la historia de Boss te ha tocado el corazón.