Durante un tiempo, Barsik vivió en un taller mecánico cercano, luego se instaló con los trabajadores que viven cerca, pero siempre merodeaba alrededor del refugio de animales. Después, decidió quedarse allí, pero no quería vivir en la casa común, prefiriendo mantener una distancia.
Tranquilo y agradecido
Barsik no disfruta de las grandes multitudes, pero es uno de los primeros en correr hacia los cuencos durante la hora de la comida. Evita a las personas extrañas, pero adora a aquellos que lo alimentan y lo acarician. Tras estos humanos, lo seguiría como un perrito, ronroneando. Este nene se ha preparado para mudarse a un hogar con su nuevo dueño, ha aprendido a usar la caja de arena y la rascadora. Puede vivir en una casa donde haya niños.
Buscamos un hogar donde pueda ronronear de comodidad
Hasta su nombre, Barsik, es tan cálido y hogareño que es difícil imaginar a este hermoso en un refugio de animales. Apóyalo en su búsqueda de un hogar: paga la publicidad, y nosotros mostraremos su anuncio en las redes sociales a las personas de su ciudad. Ayuda al refugio de animales a cubrir los costos de mantener a este peludo y rayado mientras no encuentra un nuevo hogar: compra un Día de Gato o un Mes de Gato para Barsik.