Ayaka es una gata amable y tranquila que siempre ha sido la fiel compañera de su anciana dueña. Tras la partida de su abuela, el destino de Ayaka cambió. Lamentablemente, no pudo llevarse bien con los otros animales en casa de su nieta y fue llevada al refugio de animales.
Necesita cuidado
A medida que ha ido cumpliendo años, Ayaka se ha vuelto menos activa; sus patas traseras están debilitándose y necesita atención adicional. En este momento, la están examinado para determinar posibles problemas renales. Esta sabia y un poco cansada de los cambios en la vida gatita está esperando a un dueño cariñoso y sensible, con quien pueda volver a sentirse querida y apreciada.
¿Buscas una amiga?
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